Es tan breve que el verdadero sentimiento se queda siempre a las puertas de la conciencia.
Son palabras fugadas, reinas del escapismo que huyen por la ventana. Mueve los labios para formarlas pero no aparecen, tienes una lengua mal domesticada que no hace lo que quieres, pero es porque tu cerebro hace interferencias. Piensas demasiado, te lo piensas demasiado, se va a ir y no te lee la mente, al final se irá sin saber que le quieres.
no pensar: dar luz, ser luz, quemar
ResponderEliminaren cuestiones del corazón es mejor no meter al cerebro...
ResponderEliminarNo hay que usar tanto la cabeza cuando se trata del corazón
ResponderEliminarCorazón, ahora o nunca, me siento como la chica de la que hablas. Demasiado cerebro y siento que se me escapa de entre las manos
ResponderEliminartal vez como dijo J.S.
ResponderEliminarsiempre tuvo la frente muy alta, la lengua tan larga, y la falda muy corta.
un saludo en la lejania.
Waaaa
ResponderEliminaru.u
comprendo a la perfección lo que es eso... no decir lo que se siente por miedo, pesadez, horas oscuras... dejar pasar el tiempo y descubrir que era mejor decirlo... que las cosas dichas son lo mejor...
leí otros escritos de tu blog
waa he llorado
vaya, soy tu seguidora número 100! eso es de suerte ¿no?
saludos :)
No, ni se te ocurra dejarle ir sin que se entere bien.
ResponderEliminarme encanto el fragmento...
ResponderEliminarmuy bien escrito :)
Te sigo, ok?
lengua mal domesticada, eso me gusta sisi
ResponderEliminarMe encantó!
ResponderEliminarPero qué...¿no sabe interpretar las miradas...? ¡Vaya..!
ResponderEliminarde esas lenguas hay a montones. :)
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